domingo, 5 de octubre de 2008

Contigo no, bicho

Yo pensaba que no había nada más frustrante que intentar entrarle a un travesti y que éste te empujara sin dejarte siquiera decir hola. Pero no, afortunadamente no es así. He visto algo mucho más denigrante, lo cual consuela mi dolorido ego. Lo más frustante, hermanos merovingios, es que empieces la noche tomando unas copas, que cuando vayas un poco entonado aquella chica que lleva toda la noche mirándote, que no parecía gran cosa cuando ibas sobrio pero que algo ebrio empieza a tener su morbillo, te lance una sonrisa insinuante. Entonces tú te lías la manta a la cabeza, te acercas a ella con tu sonrisa más seductora, en un alarde de originalidad le espetas "Hola, ¿quieres tomar algo conmigo?", con lo cual sabes que ella caerá rendida a tus pies, y en ese mágico momento ella, con su seductora voz, te responde: "Contigo no, bicho". Eso sí que es difícil de superar.


2 comentarios:

Richard dijo...

Jeje, qué cosas. La verdad es que las tías tienen estas cosas: se exhiben por ahí como ofreciéndose a que les entres, y luego están deseando mandarte a paseo. Lo bueno es que no es siempre así, y a veces se conoce a chicas simpáticas y divertidas. En cualquier caso, este hombre da un perfecto ejemplo de lo que no hay que hacer: rayarse. Si has tenido éxito disfrútalo, pero si no lo has tenido, no le des muchas vueltas: sencillamente sal otro día, que la suerte cambia constantemente.

Richard dijo...

Hola de nuevo, me comentan fuentes bien informadas que este pobre hombre no tuvo bastante con que chewbacca lo humillara, ni con que sus amigos le grabaran en vídeo y lo colgaran en internet. No, resulta que, encima de todo, lo sacaron por la tele. Igual ya lo sabíais, pero yo lo acabo de ver: aquí está la prueba.

Pobre hombre, es el colmo de la humillación.